Según los datos del Índice Red Eléctrica (IRE), el consumo industrial descendió un 3% y el de los servicios un 2,4%. El IRE es un indicador cuyo objetivo es facilitar información sobre la evolución del consumo eléctrico del conjunto de las grandes y medianas empresas, entendidas como aquellas que tienen una potencia contratada superior a 450 kilovatios.
Si comparamos el mes de diciembre de 2017 con el del pasado año, centrado en más de 23.400 puntos de alrededor de 13.900 empresas de las cinco actividades con mayor consumo eléctrico, la demanda de la metalurgia bajó un 3,7% y la industria química un 7%; la fabricación de otros productos minerales no metálicos creció un 4,4%, y la industria de la alimentación un 2,8%; mientras que la industria del papel cayó un 0,1%.
En este sentido, las actividades que más aportaron al consumo de las grandes empresas durante el mes fueron la fabricación de otros productos minerales no metálicos, con un aumento del 4,4%, la industria de la alimentación (+2,8%), el suministro de energía eléctrica, gas, vapor y aire acondicionado (+8,7%), otras industrias extractivas (+4,1%) y el comercio al por mayor e intermediarios del comercio excepto de vehículos de motor y motocicletas (+1,5 %).
Fijándonos en los datos de los últimos 12 meses, el consumo eléctrico de estas empresas, corregidos los efectos de la laboralidad y las temperaturas, descendió un 1,3% respecto al ejercicio 2017. Desglosado por sectores, el consumo de la industria descendió un 2,5% y el de los servicios aumentó un 0,6%, según los datos del índice de Red Eléctrica.
