Según AleaSoft, que ha analizado la evolución del consumo de electricidad a la salida de la crisis y durante la recuperación económica, se observa un cambio claro en el uso de la electricidad y un aumento de la eficiencia eléctrica en empresas e industrias. Al ser la electricidad un gasto importante en la economía empresarial, la tendencia lógica es a reducir el consumo y optimizarlo de manera que el precio por kWh consumido sea más bajo.
La demanda de electricidad en España experimentó un importante crecimiento hasta 2008. La relación entre consumo de electricidad y PIB se hace evidente nuevamente entre 2008 y 2013, cuando la crisis económica hace caer el PIB un 8,9% y le siguió un descenso de la demanda eléctrica del 6,6%. Pero el cambio interesante llega en 2014, cuando la economía empieza a mostrar signos de recuperación, y el PIB empieza a crecer de nuevo a un ritmo parecido a antes de 2008. También lo hace el consumo de electricidad, pero ahora a un ritmo mucho menor que el PIB. La reducción de la intensidad energética es un claro indicador del aumento de la eficiencia energética después de la crisis.
Además del aumento de la eficiencia eléctrica, también se ha mencionado la optimización del consumo para reducir el coste. Para determinar si se ha producido un cambio de hábitos para reducir el coste de la electricidad adquirida, AleaSoft ha analizado la evolución del rango diario de la demanda eléctrica horaria, donde se observa una tendencia a desplazar la demanda del pico del día al valle de la noche, con un rendimiento mucho mayor a la diferencia de precio final entre las horas del día y de la noche.
